Con un spa sacado de una película y situado justo en la orilla del río Duero, en Vila Nova de Gaia, el hotel The Rebello suma vídeos y vídeos en redes sociales
31 mar 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Al otro lado del río Duero, en Oporto, y en la menos conocida Vila Nova de Gaia, se esconde un hotel de cinco estrellas que hace tanto las delicias de quienes lo visitan como de otros que lo encuentran en Tik Tok, The Rebello. Porque si algo aporta valor en la actualidad es ser viral en la aplicación de vídeos verticales.
Sus instalaciones tienen parte de realidad e historia. El nombre del hotel viene de un juego de palabras a medio camino entre la actitud rebelde que los define, según cuenta su director Ludwig Melo a La Voz, y el pasado vitivinícola: «Los barcos rabelo, que eran de madera y de cola pequeña, se encargaban de transportar barriles de vino por el río desde los antiguos viñedos del valle del Douro hasta las casas portuarias de Gaia», explica. El edificio, además, fue hace doscientos años un almacén de una fábrica de menaje de cocina y de vino.
En el exterior, a un paso, literalmente, del río, tiene un estilo sobrio que respeta el diseño industrial de la zona del siglo XX, pero en su interior, mezcla cuatro temáticas: agua, vino, madera e industria. «Ejemplos de ello son la recepción, con piezas de madera reutilizada de los famosos rabelos; el tapiz con una sirena colgada en el vestíbulo, o la hierba de la pampa (como la que se encuentra a orillas del Duero) que guía a los visitantes hasta el spa. En las habitaciones, los cabeceros evocan las ondas del río y los lavabos se inspiran en antiguos depósitos de agua», explica el responsable.
Detalles que no pasan desapercibidos, sobre todo, porque los trabajadores no lo permiten. Al llegar a la puerta del hotel, uno de ellos recoge las maletas para subirlas a la habitación, y otro realiza un tour por todas las instalaciones. Historia del hotel, funcionamiento y sugerencias de la ciudad incluidas. lo que más suele llamar la atención, según su director, es el servicio, las vistas al río y las instalaciones. No es para menos.
El spa, que imitalas termas romanas, parece sacado de una película del director Wes Anderson. Está compuesto por una piscina climatizada, una sauna, un gimnasio y cuatro salas de tratamiento; un espacio que recuerda a los spas urbanos, tan de moda en la actualidad. La viralidad de esta zona no se le escapa al director, quien reconoce que los acerca a clientes potenciales que quieran vivir esta experiencia. Tiene claro que una vez que la prueban, la recomiendan. El boca a boca «es una parte tan importante como los vídeos en las redes sociales», dice.
Suma 103 habitaciones, algunas de ellas apartamentos con terraza que te hacen querer mudarte a Oporto. Y aunque la diferencia entre unas y otras sea clara, en todas hay un mimo en forma de detalle. Más allá de infusiones y cafés ilimitados, el hotel invita a sus huéspedes a la primera botella de vino de Oporto, así como a la primera ronda de refrescos y cervezas.
Si esto parece poco, en el cuarto piso espera el The Rebello The Rooftop, que muchos definen como el mejor sitio para tomarse un cóctel —o cualquier otra bebida— con vistas al río. Y si cuando llega la noche, alguien se siente exigente de más, en este hotel el menú no solo es de comida, sino de almohadas, que también se sirven a la carta.