Luis Planas: «Estamos dispuestos a negociar, negociar y negociar, hasta llegar a intereses positivos para Estados Unidos y para España»

Somos Agro REDACCIÓN

AGRICULTURA

Blanca Millez | EFE

El ministro mantuvo un encuentro con las organizaciones agrarias, que quiren que se mantenan las negociaciones

15 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha anunciado una estrategia comercial basada en tres ejes para afrontar la incertidumbre generada por las amenazas arancelarias de Estados Unidos y diversificar los destinos de las exportaciones agroalimentarias españolas. Lo ha hecho tras reunirse con representantes de ASAJA, COAG, UPA y Unión de Uniones.

Planas ha trasladado a las organizaciones profesionales agrarias un mensaje de «tranquilidad y confianza» en un contexto internacional marcado por los anuncios de medidas y contramedidas del presidente estadounidense, Donald Trump, que han creado un clima de inestabilidad en los mercados. Según el ministro, «la obligación y el trabajo del Gobierno es dar rumbo, certeza y buscar respuesta para cada situación». 

Una de las prioridades señaladas por Planas es mantener e incluso ampliar la presencia comercial en Estados Unidos. No obstante, ha advertido que «no se puede aceptar como nueva normalidad un 10 % de aranceles de partida a todos los productos». Actualmente, la Unión Europea y España mantienen conversaciones con Washington tras la decisión de Trump de aplicar unha moratoria de 90 días sobre a imposición dunha taxa aduaneira do 20 % a todos os produtos europeos.  «Estamos dispuestos a negociar, negociar y negociar, hasta llegar a intereses positivos para las dos partes», insistió el ministro, destacando la voluntad española de buscar acuerdos que eviten barreras comerciales perjudiciales para el sector primario.

Junto a la estrategia hacia EE. UU., Planas ha defendido a importancia de «mantener y ampliar el mercado interno de la UE», que concentra dos tercios de las exportaciones agroalimentarias, así como de «diversificar» destinos con acuerdos comerciales como los de Canadá, Corea, Xapón o Emiratos Árabes Unidos. Respecto al Mercosur, aseguró que es «una excelente oportunidad» y se comprometió a «un mayor esfuerzo de explicación […] con absoluta transparencia porque no hay nada que ocultar».

También se abordaron cuestiones como la futura Política Agraria Común (PAC), el relevo generacional en el sector agrario y las nuevas propuestas para el vino presentadas pola Comisión Europea. De hecho, el ministro ha analizado junto a las organizaciones profesionales agrarias la Visión para la Agricultura y la Alimentación presentada por la Comisión Europea, de la Unión Europea (UE), sobre la que han compartido la opinión de que «va en una dirección positiva». «Aplaudimos esta iniciativa, pero ahora falta que a esa música que bien suena se le ponga una buena letra, y de todas las `propuestas la más importante es la Política Agraria Común (PAC), que debe estar bien dotada financieramente y con personalidad institucional y jurídica propia», explicó también. 

Una dotación económica suficiente, pero también el diseño de las medidas de la PAC post 2027 son fundamentales, ha explicado el ministro, para afrontar los principales retos de futuro en materia de competitividad, resistencia y adaptación al cambio climático, transformación digital e innovación, y relevo generacional. Una de las conclusiones adoptadas en la reunión ha sido la próxima convocatoria a las organizaciones agrarias y a las comunidades autónomas para configurar una posición básica de España sobre los elementos que deben configurar la próxima PAC, como una mayor simplificación, la definición de agricultor activo, o la orientación de las ayudas, entre otras.

 Durante el encuentro las organizaciones han advertido de los efectos negativos que tiene la imposición de aranceles para los productores nacionales, ya que puede derivar en un alza de precios y de los costes de producción; aunque Unión de Uniones ha ido más allá y ha pedido «reaccionar ya». El presidente de Asaja, Pedro Barato, ha hecho hincapié en la necesidad de mantener el mercado norteamericano, a pesar de la apertura a nuevos países: «Nuevos mercados sí, pero hay que insistir en los que tenemos».

Asimismo, ha solicitado al Ministerio una reunión para analizar las consecuencias de la futura Política Agraria Común (PAC) ya que algunos sectores se encuentran con «dificultades», como es el caso de los cereales, producto en el que «algunos están usando como excusa los aranceles para bajar su precio». Los costes de producción «siguen subiendo día a día» lo que se suma a las incertidumbres derivadas de la guerra comercial, por lo que ha reclamado al Gobierno que destine una partida del presupuesto para hacer frente a los aranceles en ayudas al sector agrario.

El secretario general de COAG, Miguel Padilla, ha defendido «agotar todas las vías de negociación» entre la UE y EE.UU. para evitar la escalada de la guerra comercial y «mitigar al máximo los aranceles».

Padilla ha advertido de que «no podemos hacer un apocalipsis total (de la situación), porque le damos un arma muy importante a algunos manipuladores», quienes, según ha explicado, se aprovechan de no poder enviar el producto a EE.UU. para subir su precio y tenerlo en «estocaje». En su primera intervención en Agricultura como nuevo secretario general de UPA, Cristóbal Cano, ha agradecido al Gobierno su viaje a China y Vietnam para ampliar los lazos comerciales, ya que «Estados Unidos ha dejado de ser un socio fiable».

Para Cano, detrás de la guerra comercial «subyacen ciertos mensajes de negacionismo de la crisis climática» y, por ello, ha urgido a «no dar ni un paso atrás» en la forma de producción nacional que ha hecho ser al sector una «potencia alimentaria».

«La guerra nos la ha impuesto Trump», ha recalcado el coordinador estatal de Unión de Uniones, Luis Cortés, quien ha emplazado a la UE «reaccionar», pues los efectos de las políticas del presidente estadounidense se pueden ver en su anterior legislatura, que han provocado que se haya «dejado de producir aceituna negra» en España.

Cortés se ha mostrado contundente: «Si hacemos exactamente lo mismo que hace siete años, los aranceles del señor Trump nos los volvemos otra vez a comer».